El acoso laboral, una amenaza para el corazón

Si un mal jefe o un compañero de trabajo lo acosan, su corazón podría pagar el precio, muestra una investigación reciente.

Las víctimas del acoso o la violencia en el trabajo se enfrentaban a un riesgo más alto de enfermedad cardiaca y accidente cerebrovascular, encontraron los investigadores.

El acoso laboral, una amenaza para el corazón
| Foto: GETTY IMAGES

El nuevo estudio de más de 79,000 trabajadores europeos no pudo probar causalidad. Pero si de hecho hay un vínculo causal, eliminar el acoso en el lugar de trabajo "significaría que podríamos evitar un 5% de todos los casos cardiovasculares", teorizó la líder del estudio, Tianwei Xu, estudiante doctoral en la Universidad de Copenhague, en Dinamarca.

Aunque los conflictos en el trabajo no provoquen problemas cardiacos, "sin duda exacerban a las enfermedades cardiacas", señaló Curtis Reisinger, jefe de servicios psiquiátricos en el Centro Médico Judío de Long Island, en New Hyde Park, Nueva York.

En el nuevo estudio, el equipo de Xu siguió los datos a largo plazo de más de 79,000 empleados adultos en Dinamarca y Suecia, de 18 a 65 años de edad, sin antecedentes de enfermedad cardiaca.

Un 9% reportaron haber sido acosados en el trabajo, y un 13% reportaron haber experimentado violencia o amenazas de violencia en el trabajo en el año anterior.

Tras ajustar una variedad de factores, los investigadores encontraron que los que fueron acosados en el trabajo tenían un riesgo de enfermedad cardiaca un 59% o más alto que los que no se vieron expuestos al acoso. Las personas que sufrieron violencia o amenazas en el trabajo tenían un riesgo un 25% más alto, frente a las que no tuvieron ese tipo de experiencia.

Los riesgos parecían aumentar junto con el nivel de amenaza, según un comunicado de prensa de la Sociedad Europea de Cardiología (European Society of Cardiology). En comparación con los que no fueron acosados, las personas que dijeron que habían sido acosadas con frecuencia (casi cada día) en los 12 meses anteriores tenían un riesgo de enfermedad cardiaca un 120% más alto, señalaron los autores del estudio.

Y en comparación con los que no fueron sometidos a violencia o amenazas en el lugar de trabajo, los que fueron afectados con la mayor frecuencia tenían un riesgo un 36% más alto de accidente cerebrovascular y otros problemas de los vasos sanguíneos del cerebro, mostraron los hallazgos.

El Dr. Satjit Bhusri es cardiólogo en el Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York. Al leer los hallazgos, comentó que "comenzamos a comprender cada vez mejor el concepto de la enfermedad cardiaca inducida por el estrés, que también se conoce como 'síndrome del corazón roto'. Este estudio muestra una asociación entre un factor estresante de ese tipo, el acoso, y la enfermedad cardiaca".

Explicó que, como muchos otros animales, los humanos pueden estresarse hasta llegar a un estado de "arousal" (activación) que, si es constante, puede provocar daño cardiovascular. El acoso en el lugar de trabajo, particularmente, puede perpetuar ese estado estresado, llevándolo "a casa, a la recreación, al sueño y a las vacaciones".

Los jefes son las fuentes usuales de ese estrés, y "desde una perspectiva de los recursos humanos, se dice que la gente deja a su jefe, no a su trabajo", comentó Reisinger. "El jefe es la persona esencial para mantener o fomentar o ignorar la descortesía en el lugar de trabajo".

Pero aunque tenga la mala suerte de tener un jefe acosador, hay formas de afrontarlo.

"Las habilidades de reducción del estrés incluyen a técnicas como la relajación muscular progresiva, el entrenamiento en habilidades de mindfulness, el entrenamiento en habilidades cognitivas conductuales, la biorretroalimentación, el yoga y habilidades similares", apuntó Reisinger. "Éstas pueden hacer mucho por calmar sus reacciones ante un ambiente laboral hostil".

Los hallazgos aparecen en la edición del 18 de noviembre de la revista European Heart Journal.

Más información

La Asociación Americana del Corazón (American Heart Association) ofrece consejos para la prevención de las enfermedades cardiacas.

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