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El colesterol “malo” ataca a los jóvenes de Estados Unidos

Muchos adolescentes estadounidenses, entre ellos algunos que tienen peso normal, ya presentan uno o más factores de riesgo para la enfermedad cardiaca, advierten investigadores. Hoy casi un 22 por ciento de los adolescentes tienen alto o casi alto el colesterol LDL, que es el tipo malo. Y el 15 por ciento tienen prediabetes o diabetes, según una investigación reciente basada en datos que abarcan de 1999 a 2008.

Cuando los autores del estudio observaron las diferencias por año, notaron que al inicio del periodo del estudio, la tasa de prediabetes y diabetes era de 9 por ciento y para el final del mismo, la cifra había subido al 23 por ciento.

El colesterol “malo” ataca a los jóvenes de Estados Unidos

Puntos clave

"La prediabetes y la diabetes aumentaron con el tiempo entre los adolescentes", apuntó Ashleigh May, epidemióloga de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.

La enfermedad cardiovascular es la principal causa de muerte entre los adultos de EU, según la información de respaldo del estudio. Aunque la mayoría de manifestaciones, como el accidente cerebrovascular y el ataque cardiaco, no ocurren hasta la adultez, hay evidencia creciente de que los factores de riesgo de la enfermedad cardiovascular podrían manifestarse mucho antes. 

Cada vez más niños y adolescentes en EU tienen sobrepeso o son obesos, y los expertos en salud están preocupados sobre la posibilidad de que los factores de riesgo cardiovascular se presenten a edades menores.

Para este estudio, los investigadores se enfocaron en 3,383 adolescentes de entre 12 y 19 años. El 14 por ciento tenían o estaban en riesgo de presión arterial alta (prehipertensión o hipertensión), 22 por ciento tenían niveles de colesterol malo (LDL) casi altos o altos, y 6 por ciento tenían niveles bajos de colesterol bueno (HDL). Para el periodo del estudio en general, se clasificó a 15 por ciento de los adolescentes con prediabetes o diabetes; este fue el único factor de riesgo que aumentó del inicio al final del estudio.

El estudio también halló que a medida que el peso aumentaba, lo mismo sucedía con los factores de riesgo cardiovasculares. Sin embargo, un número significativo de niños de peso normal también mostraron señales de problemas. Alrededor del 10 por ciento estaban en la categoría de prehipertensión o hipertensión, más de 15 por ciento tenían colesterol malo elevado, y más de 10 por ciento tenían prediabetes o diabetes.

La Dra. Dorothy Becker, jefa de endocrinología y diabetes del Hospital Pediátrico de Pittsburgh, dijo que los hallazgos no le sorprendieron, incluso que algunos niños de peso normal mostraran factores de riesgo de enfermedad cardiaca. Apuntó que cualquiera que coma una dieta alta en azúcar y grasa probablemente tendrá problemas, aunque no sean aparentes por su peso. "No es solo el aspecto. Se puede tener un estilo de vida bastante malo sin tener sobrepeso", aseguró.

Médicos, padres, administradores de escuelas y hospitales, y líderes comunitarios deben tomarse el sobrepeso y la obesidad en serio, enfatizó. "Los médicos deben señalar que es un riesgo tan grande para la salud como fumar o el sexo no seguro", apuntó Becker. Sin embargo, un cambio en el estilo de vida puede hacer una diferencia y "nunca es demasiado tarde para mejorar los hábitos, actividad física y alimentación. Si uno no está haciéndolo bien, cambiar esas cosas puede resultar beneficioso", dijo May.

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