De acuerdo con los resultados de una investigación realizada en la Universidad de Granada y del Hospital Clínico San Cecilio de Granada, España y publicada en la revista Nutrición Hospitalaria, la actividad física tres veces por semana durante un año mostró un impacto positivo en el control de la apnea y mejoró la calidad del sueño.
Los ronquidos son el síntoma nocturno más evidente de las apneas. Este síndrome impide el efecto reparador del sueño porque causa microdespertares cerebrales necesarios para reactivar la respiración, lo que repercute en la conducta diurna del niño y afecta su función neurocognitiva.
Puntos clave
- La actividad física tiene un impacto positivo para reducir la apnea del sueño infantil.
- Tres veces por semana de ejercicio mostró su impacto positivo.
- Los ronquidos son el síntoma nocturno más evidente de las apneas del sueño.
Para llevar a cabo esta investigación, los científicos trabajaron con una muestra formada por 60 niños y adolescentes con edades comprendidas entre los 10 y los 18 años, que acudieron a la consulta de Endocrinología por tener obesidad en los Hospitales San Cecilio y Virgen de las Nieves de Granada, además de 12 centros de salud de la capital. Todos tenían un índice de masa corporal (IMC) superior a 25.
A todos los participantes se les sometió a un programa de intervención de 12 meses de duración, con tres sesiones a la semana de actividad física que incluía juegos colectivos, deportes aeróbicos y alternativos, ciclismo y senderismo, independiente de la hora semanal de Educación Física que los niños realizan en el colegio.
La apnea del sueño se midió mediante una polisomnografía y un cuestionario de calidad del sueño y se hizo una valoración nutricional a través de un cuestionario de frecuencia de consumo alimentario y una ficha antropométrica.
Cómo detectar el síndrome de apnea del sueño
La Academia Americana de Pediatría refiere que el síndrome de apnea del sueño es un problema común que afecta a cerca de un 2% de todos los niños, incluyendo muchos que no han sido diagnosticados. Advierte que si no se recibe tratamiento, la apnea del sueño puede conducir a diversos problemas, incluyendo problemas del corazón, de conducta, de aprendizaje y de crecimiento.
Los síntomas incluyen: ronquidos frecuentes, problemas para respirar durante la noche, somnolencia durante el día, dificultad para prestar atención y problemas de conducta.
