Si por algún motivo llegas a discutir con tu pareja en estos días de fiesta, la alimentación te puede ayudar a salvar el momento. Un estudio reciente descubrió que la agresividad y el bajo autocontrol entre parejas podría dispararse por una baja concentración de azúcar en la sangre.
Los resultados de la investigación fueron presentados en la Academia Nacional de Ciencias, donde un grupo de expertos del departamento de psicología de la Universidad del Estado de Ohio, trabajó durante tres semanas con 107 parejas heterosexuales y casadas en promedio, durante 12 años. 
Durante las pruebas, cada noche se les dio a los participantes una muñeca de vudú y 51 alfileres. Se midieron los niveles de glucosa en la sangre y se les pidió que pincharan la muñeca según su grado de enojo, imaginando que se trataba de su cónyuge.
También hicieron una competencia a través de una computadora, en la que debían apretar un botón cada vez que aparecía un cuadrado rojo. El oponente era supuestamente el cónyuge, pero en realidad se trataba de la misma computadora.
El que tardaba más de medio segundo en contestar, o lo hacía en último lugar, perdía. El ganador podía “castigar” al oponente enviando un sonido desagradable a través de los auriculares, del que podían elegir tanto la duración como la intensidad.
Los sonidos desagradables podían ser el de las uñas arañando una pizarra, el del torno del dentista o el de una ambulancia, entre otros. La intensidad se medía del 1 al 10, aunque también había una opción “0” sin sonido, para quien no deseaba castigar al perdedor con ruidos molestos.
Al evaluar los resultados, los investigadores descubrieron que los participantes con menor nivel de azúcar en la sangre clavaron más alfileres y enviaron sonidos más intensos y prolongados. Esto permitió medir el nivel del sentimiento de agresividad, donde quienes tuvieron niveles más bajos utilizaron el doble de alfileres.
Aunque no lo parezca, los resultados no fueron tan alarmantes. Según explica Richard Pond Jr, coautor del estudio de la Universidad de Carolina del Norte, el 70% del tiempo los participantes no pincharon las muñecas. El promedio fue de algo más de un alfiler por noche y por persona, aunque hubo tres personas que clavaron los 51 alfileres en una sola vez, y una de ellas lo hizo en dos oportunidades.
Según las conclusiones del estudio, para prevenir batallas campales en el hogar, las parejas pueden recurrir sencillamente a un dulce. Una baja dosis de azúcar en la sangre los pone más susceptibles y belicosos, ya que según explica uno de los investigadores, el psicólogo Brad Buschman, se sienten entre hambrientos y enojados.
El experto explica que para tener control sobre nosotros mismos, necesitamos glucosa, en especial para contener la ira, que es la emoción más difícil de contener.
