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Arándano rojo contra la cistitis

El estudio publicado en la revista científica BMC Urology comprobó que tras un tratamiento de tres a seis meses con un preparado de arándano rojo se consiguió reducir de forma significativa las infecciones urinarias. El consumo de 118 miligramos al día logró disminuir en un 75 por ciento el número de infecciones urinarias después de 3 meses de ingesta y hasta en un 93 por ciento tras un tratamiento de seis meses.

El arándano pertenece a la familia de las ericáceas y es rico en flavonoides, antocianinas y proantocianidinas; contiene 90% de agua, ácido quínico, ácido málico, ácido cítrico, glucosa y fructuosa.

Arándano rojo contra la cistitis
| Foto: SHUTTERSTOCK

Puntos clave

  • El consumo de 118 miligramos al día redujo 75% las infecciones urinarias.
  • Las proantocianidinas es lo que impide a cierta bacterias adherirse a las paredes de las vías urinarias.
  • El arándano rojo americano puede ser una alternativa para el tratamiento de la cistitis postcoital.

De acuerdo con los resultados, las proantocianidinas (PAC), un grupo de compuestos polifenólicos presente en el arándano, cuya acción es la creación de una fina capa sobre las paredes de los tejidos, es lo que impide a ciertas bacterias adherirse a las paredes de las vías urinarias y evitar infecciones. "Son las de tipo A las que se relacionan con la actividad antiadhesiva y que disminuyen la adherencia de Escherichia coli a las paredes de las vías urinarias", explicó el coautor de la investigación, Francisco Sánchez Ballester.

La Asociación de Cistitis Intersticial (Interstitial Cystitis Association) calcula que entre 3 millones y 8 millones de mujeres en los Estados Unidos tienen esta afección. Bajo la normativa de la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio los servicios de cuidados de salud preventivos para mujeres (como mamografías, controles del cáncer de cuello de útero y otros) ya están cubiertos sin costos compartidos en algunos nuevos planes de salud. Conoce más de estas opciones en el Centro de Seguros Médicos.

¿Qué tan efectivo es el arándano?

Según el Centro de Investigaciones sobre Fitoterapia y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) la ingesta del arándano rojo americano puede reducir los episodios de infecciones de orina a la mitad, por lo que se recomienda su uso para tratar las infecciones de orina recurrentes.

La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos reporta que el arándano rojo tiene una larga historia de uso por las tribus de Indios Nativos Americanos principalmente para el tratamiento de enfermedades urinarias. Las investigaciones muestran que el tomar un cóctel de jugo de arándano rojo puede ayudar a prevenir las infecciones del tracto urinario (ITUs) recurrentes en las mujeres mayores y en las mujeres embarazadas. Investigaciones adicionales muestran que el tomar jugo de arándano rojo puede también prevenir las ITUs en los pacientes hospitalizados. Algunas investigaciones clínicas también apoyan el uso de cápsulas de arándano rojo para prevenir las ITUs recurrentes.

Se pensaba que actuaba acidificando la orina, pero en estudios recientes se ha demostrado que sus sustancias activas: la fructuosa y las proantocianidinas actúan impidiendo la adhesión de la bacteria E. coli al urotelio, principalmente en mujeres. La revisión afirma que el arándano actúa como preventivo, no como tratamiento de las infecciones urinarias.

El arándano rojo, al igual que muchas otras frutas y vegetales, contiene cantidades significativas de ácido salicílico, el cual es un importante ingrediente de la aspirina. El tomar jugo de arándano rojo en forma regular aumenta la cantidad de ácido salicílico en el cuerpo. El ácido salicílico puede disminuir la hinchazón, prevenir la formación de coágulos sanguíneos, y puede tener efectos antitumorales.

Más sobre la cistitis

La cistitis es causada por gérmenes, por lo regular bacterias que ingresan a la uretra y luego a la vejiga. Estas bacterias pueden llevar a infección, casi siempre en la vejiga, y ésta puede diseminarse a los riñones, según información de la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU.

La mayoría de las veces, el cuerpo puede deshacerse de estas bacterias cuando usted orina. Sin embargo, algunas veces, las bacterias pueden adherirse a la pared de la uretra o la vejiga o multiplicarse tan rápido que algunas de ellas permanecen en la vejiga.

Las mujeres tienden a contraer infecciones con más frecuencia que los hombres, debido a que su uretra es más corta y está más cercana al ano. Por esta razón, las mujeres son más propensas a contraer una infección después relaciones sexuales o al usar un diafragma para el control de la natalidad. La menopausia también aumenta el riesgo de una infección urinaria aunque la mayoría de los casos son causados por la Escherichia coli (E. coli), un tipo de bacteria que se encuentra en los intestinos.

Ardor al orinar, cambios en la apariencia de la orina, presión o calambres en la parte baja del abdomen o en la espalda, necesidad imperiosa de orinar con frecuencia, incluso inmediatamente después haber vaciado la vejiga son síntomas de la infección.

La llamada cistitis postcoital o de luna de miel se trata de una inflamación que se presenta en algunas mujeres después de mantener relaciones sexuales. Cualquier mujer sexualmente activa puede contraerla aunque cabe destacar que no es una infección de transmisión sexual.

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