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Maquillaje permanente o micropigmentación

Es un recurso tomado de la antigua práctica del tatuaje que usaron varias civilizaciones de todos los tiempos con distintos significados. 

Servían para determinar la pertenencia a alguna casta o rango,  como símbolos mágicos o mortuorios, para identificar a los criminales, con fines terapéuticos y para marcar el paso a la pubertad a la adultez, entre otros múltiples fines. Se realizaban con espinas de pescado o finas cañas de bambú en los que introducían pigmentos naturales o tinta china.

Maquillaje permanente o micropigmentación

Puntos clave

  • La pigmentación artificial te permite parecer maquillada todo el tiempo.
  • A veces puede haber un cambio de color en los tintes utilizados
  • Revertir la micropigmentación es un proceso costoso y delicado.

Actualmente se utilizan pigmentos de origen mineral - óxidos ferrosos – que pueden llegar a provocar reacciones alérgicas en algunas personas; por ello también está la opción de recurrir a algún tipo de pigmento de origen animal. Mediante finas agujas descartables y un torno manual se va descargando la tinta hasta lograr el efecto deseado. Se puede regular la profundidad a la que se quiere hacer el trabajo -que en general es de 1,5 milímetros- según el tipo de zona que se va a pigmentar.  La aplicación es ambulatoria, toma entre 20 y 30 minutos, se puede aplicar anestesia local y luego un antiséptico para limpiar la zona tratada.

La micropigmentación se utiliza con fines decorativos como tatuajes en piernas, brazos, hombres y otras partes del cuerpo. También tiene una función correctiva al disimular imperfecciones, quemaduras y cicatrices, en casos de  alopecia definitiva total o parcial y para la reconstrucción de la areola del pezón en casos de mastectomía que lamentablemente hoy se suceden con tanta frecuencia. En este último caso se procede a crear y pigmentar una areola y un pezón con técnicas 3D hasta obtener el color y tamaño adecuados.

Últimamente es muy popular la micropigmentación como uso cosmético para maquillaje permanente, que permite delinear los ojos, resaltar cejas y labios, ruborizar mejillas e incluso crear el efecto de párpados con sombra. Para quienes usan lentes de contacto o tienen afecciones oculares como cataratas, este maquillaje permanente es una buena alternativa ya que no pueden utilizar el tradicional.

Algunas veces la micropigmentación puede tener un cambio de color con el tiempo, y por ejemplo el tono marrón oscuro puede virar al violáceo, en tanto que el rojo de los labios llega a adquirir un aspecto amarronado. Por eso en un principio se recomienda utilizar colores más suaves  (rosa en lugar de rojo, marrón en lugar de negro) para poder retocar si fuera necesario.

¿Se puede eliminar?


Este tipo de recurso requiere mucha decisión y la ayuda de un buen profesional al momento de hacer el trabajo, ya que revertirlo es peligroso, caro y complicado. Hoy la tecnología ofrece algunas soluciones:

  • tratamientos con láser
  • excisión: cirugía para eliminar la capa de piel
  • dermoabrasión: aplicación de productos químicos para irritar y quitar la piel.

Si la pigmentación está distribuida a distintas profundidades de la dermis es mucho más complicada la remoción ya que el color se desvanece y cuanto más claro es, mas difícil resulta eliminarlo. También puede resultar peligroso el uso de láser en algunas zonas como por ejemplo el nacimiento de las pestañas, ya que el folículo  piloso se puede ver afectado e inhibir para siempre el crecimiento de las mismas.

Cuidados especiales

No hay que olvidar que este procedimiento implica una herida sobre la piel, y puede por ende ser susceptible de contraer infecciones. Es importante contar con instrumentos esterilizados, extremar las medidas de higiene y acudir a personal muy capacitado.  

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