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Suplementos de aceite de pescado no retrasan el alzhéimer

El suplemento, el ácido docosahexaenoico (DHA), se encuentra en abundancia en el cerebro. Estudios anteriores habían sugerido que tal vez podía ayudar con el tratamiento de alzhéimer.

Pero resultó no ser así en el estudio más reciente, que fue financiado por el Instituto Nacional del Envejecimiento de EE. UU. y aparece en la edición del 3 de noviembre de la revista Journal of the American Medical Association.

Suplementos de aceite de pescado no retrasan el alzhéimer

Puntos clave

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Puede que sirva como método preventivo, pero no como tratamiento

"Desafortunadamente, tenemos un resultado muy sólido, aunque muy negativo, de que los complementos de DHA no ralentizaron el avance de la enfermedad de Alzheimer", señaló el martes durante una conferencia de prensa el autor del estudio, el Dr. Joseph Quinn. "No ayuda cuando un paciente ya ha alcanzado el punto en que se le puede diagnosticar enfermedad de Alzheimer. Tal ven sencillamente el estudio inició el tratamiento demasiado tarde".

Quinn, profesor asistente de neurología de la Universidad de Salud y Ciencias de Oregón en Portland, no pudo decir a qué edad los complementos de DHA podrían brindar un beneficio. Aún no se han realizado ensayos sobre la prevención.

Duffy MacKay, vicepresidente de asuntos científicos y de regulación del Consejo para la Nutrición Responsable (Council for Responsible Nutrition), un grupo que representa al sector de los complementos, señaló que la duración del estudio fue corta (18 meses), que los participantes tomaban poca cantidad de DHA y que no tomaban otro importante componente del aceite de pescado, el ácido eicosapentaenoico (EPA).

Quinn explicó que el EPA estaba casi ausente del cerebro.

Así que el nuevo estudio "sugeriría que intervenir de forma farmacológica no funciona", señaló MacKay. "Lo que realmente necesitan observar es si el consumo de pescado o los complementos de aceites omega 3 en la adultez reduce el riesgo de desarrollar alzhéimer", anotó.

Para este estudio, unos 400 hombres y mujeres con una edad promedio de 76 años fueron asignados al azar a recibir dos gramos al día de DHA o un placebo. Todos tenían alzhéimer entre leve y moderado, lo que significa que "tenían suficiente discapacidad para justificar un diagnóstico pero viven en casa, interactúan con sus familias y disfrutan una calidad de vida bastante buena", explicó Quinn. "Son personas en quienes ralentizar la tasa de progresión realmente haría una diferencia".

Los participantes no comían mucho pescado ni tomaban complementos al inicio del estudio.

Aunque los niveles de DHA tanto en sangre como en el fluido cerebroespinal aumentaron en el grupo de tratamiento, no hubo diferencias en dos medidas distintas de función cognitiva entre los grupos, reportó Quinn.
La única noticia más o menos esperanzadora fue que las personas sin la variante genética APOE-4, que confiere un mayor riesgo de alzhéimer, podrían haberse beneficiado ligeramente. Sin embargo, Quinn animó a una precaución extrema al interpretar este análisis secundario.

"No es un hallazgo tan sólido que cambiaría cualquier recomendación de tratamiento o consejo al público", dijo.
Un segundo estudio que aparece en la misma revista y que fue presentado en la conferencia de prensa encontró que ser hospitalizado o que se restrinja la actividad como resultado de enfermedad o lesión, además de la fragilidad física general, aceleraba que una persona mayor experimentara discapacidad, más discapacidad o incluso muriese.
No sorprendió que las caídas fueran particularmente responsables.

Apenas 117 participantes seguían sin discapacidad y con vida al final del estudio, en que participaron casi 800 adultos mayores y que duró una década. Una enfermedad o lesión que llevara a hospitalización aumentaba las probabilidades de pasar de no tener discapacidad a tener una discapacidad grave en más de 160 veces, apuntó el autor del estudio, el Dr. Thomas Gill, profesor de medicina de la Facultad de medicina de la Yale en New Haven, Connecticut, donde se llevó a cabo la investigación.

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La Sociedad del alzhéimer le ofrece formas de conservar su cerebro.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor

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