En Estados Unidos se ha registrado la tasa de natalidad más baja desde 1920 y cerca de la mitad de la tasa de natalidad registrada en 1957, en el medio del período conocido como “Baby Boom”.
El estudio fue realizado por el Centro de Investigación Pew, llevando a cabo un análisis de datos del Centro Nacional de Estadísticas de Salud y la Oficina del Censo. Los investigadores compararon también las características demográficas de las mujeres nacidas en EEUU y de las inmigrantes, incluyendo factores como la edad, la etnia, raza y estado civil.
Puntos clave
Esta tasa de nacimiento se venía manteniendo estable desde mediados de 1970, pero comenzó a declinar en 2007, cuando comenzó la recesión.
Y no es extraño que las mujeres latinas lideren el descenso en las tasas de natalidad. "Los hispanos fueron los más afectados por la pérdida de la riqueza, la caída de puestos de trabajo y el aumento de la pobreza", explicó el co-autor del estudio Gretchen Livingston, en un artículo de Bloomberg News.
A pesar de la reciente caída, las madres de origen extranjero siguen dando a luz a una gran parte de los recién nacidos de EEUU, una tendencia que se ha mantenido durante las últimas dos décadas. Y aunque sólo el 13 % de la población era de origen extranjero en el año 2010, los nacimientos de madres inmigrantes representaron el 23% de todos los recién nacidos en ese año, según el Centro de Investigación Pew.
El informe también encontró que la proporción de nacimientos de madres solteras (42%) y madres adolescentes (11%) fue mayor entre las mujeres nacidas en Estados Unidos en 2010 que los registrados en mujeres nacidas en el extranjero (36% y 5%, respectivamente). Mientras tanto, se observó que un mayor número de mujeres inmigrantes dio a luz a los 35 años de edad (21%) comparado con las nativas de Estados Unidos, de ese mismo grupo de edad (13%).
El documento no explica los factores que llevaron a la disminución de los nacimientos de las mujeres inmigrantes, pero todo apunta a razones económicas.
El resultado estadístico del estudio podría tener un impacto sobre Medicare y el Seguro Social, ya que ambos programas son apoyados por impuestos sobre la nómina de los adultos que están trabajando actualmente. "Cuando las familias son pequeñas, la gente confía más en estos programas", dijo Ted Fishman, experto sobre el envejecimiento de la población en el mundo. "Una baja tasa de natalidad podría ser una receta contra la pobreza masiva y el aislamiento", señaló.
Por otro lado, los investigadores creen que los responsables políticos deberían tener en cuenta el cambio en las tasas de natalidad.
Los investigadores de Pew afirmaron que según sus proyecciones para 2050, los inmigrantes que ingresaron al país desde 2005 y sus descendientes, representarán el 82% del crecimiento de la población de los EEUU.
En Estados Unidos las tasas de natalidad en adolescentes han disminuido alrededor del 37% en las últimas dos décadas, según un informe de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, su sigla en inglés), según el informe publicado en abril de 2011.
La tasa de madres adolescentes es más alta entre las hispanas y las negras no hispanas. También se observó un descenso en el uso de anticonceptivos, sobre todo en los estados con una población con creencias religiosas conservadoras, que son los mismos lugares donde las adolescentes son más propensas a dar a luz, como en Mississippi, que encabezó esa lista.
