Desafortunadamente, ciertas estrellas del espectáculo brillan más por su ausencia que por su trayectoria artística. El alcoholismo, las drogas y otros excesos pueden acabar con la vida de cualquier persona, sin importar su éxito, apariencia física o cuenta bancaria.
El 21 de abril de 2016, a los 57 años, el cantante Prince murió en su residencia de Paisley Park, en Minnesota. Según el informe forense, el intérprete de “Purple Rain” abusaba del analgésico fentanilo, uno de los opioides más poderosos, que consumía desde hace varios años con recetas médicas falsas y surtidores clandestinos.
Al igual que Prince, el “Rey del Pop” también falleció por un problema derivado del consumo de los opioides. Según el médico que lo atendió, en los últimos meses consumía propofol en exceso debido a que tenía problemas para conciliar el sueño. No obstante, estos fármacos le crearon dependencia.
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Heath Ledger se fue a los 28 años
El actor australiano Heath Ledger falleció en 2008, luego de consumir opioides en exceso como la oxicodona y la hidrocodona. Tan sólo en 2014, cerca de 4.3 millones de personas consumieron narcóticos analgésicos de manera no medicinal, informó la Biblioteca Nacional de Medicina.
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Philip Seymour Hoffman
El actor Philip Seymour Hoffman murió en febrero del 2014, a los 46 años, de una sobredosis de drogas como la heroína, cocaína y anfetamina. Según el Instituto Nacional de Abuso de Drogas los problemas de drogadicción cuestan al país más de 193 mil millones de dólares al año.
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Corey Monteith
Según la Encuesta Nacional de Abuso de Drogas y la Salud del 2003, alrededor de 3.7 millones de personas han usado la heroína en algún momento de su vida, tal como pasó con el protagonista de la serie “Glee” Cory Monteith, quien murió en julio de 2013 por abusar de esta sustancia y del alcohol.
El protagonista de la saga de películas “Rápido y Furioso” murió el 30 de noviembre de 2013 luego de sufrir un choque automovilístico por manejar exceso de velocidad. Según el Departamento de Administración de Seguridad Vial, este tipo de accidentes son la principal causa de muerte en personas de 14 a 18 años en el país.
La actriz de la telenovela “Las tontas no van al cielo” fue encontrada sin vida en el interior de su departamento de la ciudad de México el 15 de noviembre de 2013. Los reportes médicos indicaron que sufrió un paro cardiorrespiratorio a causa de la bulimia y la anorexia que padecía. Tenía 41 años.
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Amy Winehouse
La cantante Amy Winehouse también fue víctima de los trastornos alimenticios, que junto con el alcoholismo y drogadicción influyeron en su deceso, a los 27 años. El Instituto Nacional de Desórdenes de la Alimentación reporta que más de 10 millones de estadounidenses sufren algún tipo de trastorno alimentario.
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Robin Williams
Aunque siempre lucía sonriente, por dentro Robin Williams enfrentaba problemas serios de alcoholismo y drogadicción que finalmente lo llevaron a caer en depresión y optar por ahorcarse el 11 de agosto de 2014, a los 63 años. Según la Organización Mundial de Salud (OMS) cada año se suicidan un millón de personas en el mundo.
La actriz que participó en la película “Clueless”, “8 Mile” y “Just Married” falleció el 20 de diciembre de 2009 a los 32 años. Las razones, una intoxicación de hongos en su hogar mezclado con una neumonía. ¿Cuál de estas muertes te conmovió más?
